“…Si nos preguntamos con quien tuvo mayores discrepancias Perón en el gabinete, surge un nombre al unísono: Perlinger. Era evidente la falta de armonía entre ambos ministros. Hay quienes ven en la ambición de Perón la piedra de toque, sin embargo recuerda el General Martini que “en esos días sus camaradas trataron, en vano, de que Perón se hiciera cargo de la Vice-presidencia de la República: no solamente no aceptó tal designación, sino que se resistía a continuar como Ministro de Guerra. No quería que se lo acusara de ambicioso, de acaparador de cargos directivos: aducía que para él lo más importante era la Secretaría de Trabajo y Previsión, desde donde se podía obtener el más completo éxito de los objetivos de la revolución”.
Pero en última instancia quien está en política debe ambicionar y por otra parte ¿cuál es el motivo de la ambición política? ¿la egolatría es el único motor? Sería absurdo no considerar que la suma de muchas voluntades que se sienten interpretadas por un hombre no sea motivo más que suficiente para una sana ambición en pos de dar cumplimiento a lo requerido por el prójimo. La Justicia Social fue el primer motor de Perón.
Mientras Perlinger y los militares y civiles que lo acompañaban, entendían que el gobierno militar debería educar con principios éticos y religiosos a la Argentina, para lo cual era indispensable una perdurabilidad indefinida; Perón, que tomaba a los argentinos como eran, con sus propias modalidades y principios cristianos, quería elevar su nivel de vida material y espiritual, armónicamente, para lo cual era necesario organizar a la masa o como lo sintetiza Leopoldo Marechal, transformar una masa numeral en un pueblo esencial.
El día 2 de mayo de 1944 al gabinete se sumó Alberto Baldrich, en el Ministerio de Instrucción Pública; Orlando Peluffo, en Relaciones Exteriores; y dos días más tarde —el 4 de mayo— después de un interinato de 60 días, Perón fue designado Ministro de Guerra efectivo.
No sólo continúa la vinculación con los gremios, sino que es intensificada por Perón, quien el 3 de junio dice a los Ferroviarios: “Me encuentro feliz entre vosotros, que en Rosario me habéis proclamado el primer trabajador argentino. Ese título llena de honor a quienes, como yo, creen que el trabajo es la base fundamental de la grandeza del Estado y el más alto blasón de los pueblos industriosos, creadores”.
Más información en todoperon.org en la sección 1/ capítulo 4/ de: Perón, la revolución inconclusa. http://www.villamanuelita.org/todoperon/peron01/glyptodon/capitulo04/index.html
VIDEO
Perón y Farrell en un acto en la Unión Obrera Marítima. Asunción del presidente Farrell.
Duración: 2,30 minutos
https://www.youtube.com/watch?v=aRyCji9woqE
DOCUMENTO
La conciencia social
Escrito de Juan Perón
http://www.villamanuelita.org/todoperon/peron01/glyptodon/documentos/Doc-concienciasocial.pdf